Comenzando un nuevo mes, les traemos una nueva historia que contagia energía, empuje y nos inspira a perseguir el sueño de dedicarnos a lo que realmente nos gusta. La historia de hoy tiene como protagonista a Silvina Topp Knudsen y su proyecto llamado La Dulce Adela, que parece ser la combinación perfecta entre pastelería, diseño y mucho amor.
Silvina es pastelera y docente especializada en natación. Antes de que naciera su hijita, estaba dedicada full time a la docencia, dando clases de natación a niños en la primera infancia. Frente al nacimiento de su bebé, sintió que esa dedicación full time tenía que estar puesta en otro lado, necesitaba estar la mayor cantidad de tiempo con su hija, por lo que sus prioridades empezaron a cambiar. Si bien La Dulce Adela venía gestándose desde hacía un tiempo, convertirse en mamá para Silvina fue el momento perfecto para finalmente dar el salto.
La Dulce Adela ya tiene cuatro años de vida y le permite a Silvina moverse entre la maternidad, la docencia y la pastelería abiertamente. Y en este recorrido nos muestra que al inicio es importante decidirse y empezar con una idea clara, haciendo foco. Después nuestro proyecto nos irá mostrando cómo puede crecer. Para eso hay que estar atentos a las señales que emite: lo que definimos no está dado de una vez y para siempre! Los proyectos tienen vida, hablan, crecen, nos enseñan todos los días. De hecho Silvina planea a futuro combinar ese amor por enseñar y por las cosas dulces.
Cuando le preguntamos a Silvina qué fue lo que perdió en ese cambio casi instintivamente dice “Absolutamente nada!”. Pero después de unos segundos de pensar nos contesta: Bah en realidad sí perdí y mucho: perdí el stress, perdí la sensación de estar atrapada en situaciones ajenas a mí… pero también gané en calidad de vida para mí y para mi familia.
Para Silvina la inspiración es importante y nos cuenta que fue llegando de a poco, en tanto fue creando La Dulce Adela, varios oleajes de inspiración fueron llegando a este emprendimiento. En palabras de Silvina, la inspiración llegó de la mano de personas que me ayudaron, que me instruyeron, que me apoyaron la mano en la espalda para darme suavemente un empuje hacia adelante.
Para terminar, Silvina nos deja un mensaje para quienes estén gestando su propio proyecto: A quien quiera empezar yo le digo que se detenga, que se quede paradita en donde esta, que respire profundo y que sienta lo que se aproxima… creo que la respuesta viene con esa inspiración.
Gracias Silvina por contarnos tu historia y por permitirnos conocer tu hermoso proyecto! Pueden pasar a verlo en estos enlaces:
www.ladulceadela.blogspot.com.ar
@ladulceadela en Twitter e Instagram
Hasta la próxima!
