¡Hola a todos!
Hoy quiero compartir con ustedes un proceso de cambio super inspirador. En Glimar siempre decimos que no está bueno tirarse a la pileta cuando queremos cambiar de trabajo, que la planificación genera menos incertidumbre porque tenemos más chances de seguir la senda que pensábamos. También decimos que muchas veces encontrar nuestra pasión implica abrirnos a nuevas disciplinas, que el yoga, la actividad física y cualquier trabajo manual nos ayudan a conectar con lo que nos hacen bien. Todo eso vivió Marisel hasta encontrar aquello que realmente la hace feliz. Los invito a conocer su historia:
Soy Marisel y conocí a Claudina y a Glimar en abril de 2016, cuando fui a su taller «Construí tu nuevo rol laboral». En aquél entonces hacía cinco meses que había dejado mi trabajo en relación de dependencia en una multinacional, con la idea de hacer algo en forma freelance. Me formé y ejercí como Licenciada en Administración y tenía algunos servicios en mente para ofrecer.
Lo que impulsó mi decisión de dejar mi trabajo en aquel momento fue la necesidad de balancear mis energías y de darle más disfrute a mi vida. Disfrutar de lo que hago profesionalmente, disfrutar mucho más a mi hija, disfrutar de mi casa y de mis vínculos. Interiormente sentía que no podría encontrar ese balance en la forma en que venía trabajando. Sobre la decisión puedo decir que no ocurrió de un día para el otro, que es un proceso que medité durante más de dos años y que para hacerlo contaba con dos condiciones fundamentales para mí: podíamos vivir familiarmente con el ingreso de mi marido, aunque revisando algunos gastos y costumbres, y contaba con un ahorro que me iba a permitir no perder mi independencia económica por un tiempo.
Lo que más me impactó de la charla de Claudina fueron dos cosas: primero, que dijo ser seguidora de Enric Corbera, psicólogo español creador del método de la Bioneuroemoción®, porque yo leía sus libros y miraba todos sus videos con pasión, y no creo en las casualidades. Segundo, la frase “conectá con lo que te gusta”.
Disfruté del encuentro y volví casa a ponerme en marcha con mi proyecto. Le di forma, avancé un par de meses más, pero cuando estaba todo listo, algo interno me frenó… no podía avanzar, sentía que no iba a funcionar. Claro que tenía muchas barreras internas que trabajar, pero lo que más me preocupaba era que estaba dejando pasar la oportunidad de “conectar con lo que me gusta”. Aguanté uno o dos meses sin saber qué hacer pero sabiendo que si no podía avanzar, alguna razón había.
Comencé a hacer yoga, y ahí sí que me inspiré con mi profesora, una persona que ama lo que hace, que entrega un servicio con el solo fin de generar bienestar en los otros, y eso me movilizaba. Algo por ese camino tenía que explorar, pero hasta ese momento no pensaba realmente que “conectá con lo que te gusta” era una frase que podía aplicar en mí. Me sentía programada a trabajar solamente en lo que me había dedicado hasta el momento.
Fue después de dos días de bastante malestar físico y una noche oscura del alma, donde pude conectar con esta idea: “Y si estudio con Enric Corbera?” Guiada por un instinto arrasador, esa misma madrugada me inscribí en el Postgrado en Bioneuroemoción®, en el que estudié en forma online.
Hoy soy Acompañante en Bioneuroemoción® y me sigo formando en el Enric Corbera Institute y con otros profesionales, porque me interesa la conducta humana y el desarrollo del potencial que cada uno de nosotros tiene para encontrar su propia armonía. La Bioneuroemoción® es un método que busca mejorar el bienestar de la persona entendiendo el impacto de las emociones en nuestra vida. Se pretende generar un cambio de percepción en la forma que entendemos cualquier situación conflictiva que tengamos por delante, ya sea en nuestros vínculos personales, en la relación con nosotros mismos o en nuestras circunstancias o síntomas físicos.
Si tuviera que enumerar las cuestiones indispensables para un cambio laboral como el que viví, diría:
- Crear ciertas condiciones que posibiliten el cambio. A la pileta sin agua no me tiraría.
- Habilitarnos a nosotros mismos a hacer algo diferente es clave. Para los que no saben lo que realmente les apasiona, decirles que el estímulo y la motivación pueden aparecer desde los lugares menos pensados. En mi caso, hacía veinte años que leía con mucho placer sobre todos los conocimientos que engloba la Bioneuroemoción®, pero no me imaginaba que había un hilo conductor entre ellos y que yo podía hacer algo con todo eso.
- Darse tiempo. Estos cambios son procesos que se imaginan, se gestan, se maduran y se ejecutan paso a paso. Lleva un tiempo lograr vivir de ellos, pero siempre podemos entender sus etapas con una mirada ampliada. Yo estoy recién iniciando en mi nueva profesión, y mientras exploro la forma de comunicar lo que hago, sigo estudiando y también disfruto enormemente la posibilidad que esta etapa del proyecto me da para estar muy presente y conectada con mi hija en sus primeros años de vida.
- Creer. Porque como dijo Facundo Cabral “El que ama lo que hace está benditamente condenado al éxito, que llegará cuando deba llegar, porque lo que debe ser será, y llegará naturalmente.”
Para conocerme más, te invito a visitarme por aquí:
Facebook: Marisel Romano
Instagram: Marisel Romano
“Crear las condiciones que posibiliten el cambio, habilitarse a uno mismo a hacer algo distinto, darse tiempo y creer en la potencia que se expresa cuando hacemos aquello que amamos”