Nacemos dentro de una cultura que define indicadores de muchas cosas: qué es ser femenina o masculino,  qué es ser exitoso, qué es ser equilibrado, qué es ser culto, etc, etc, etc. Y además nacemos en familias con definiciones propias y que va a presentarnos el mundo desde esa posición.

Todo eso que recibimos a medida que crecemos en montones de formatos distintos (películas, novelas, paradigmas escolares, etc) es el mapa mental con el que relacionamos eventos a sensaciones. Por ejemplo: encontrar el príncipe azul te permite vivir feliz para siempre. Ser el mejor alumno te garantiza éxito  Ser feo es casi como ser indigno. No consumir es excluirse.

Qué opción tenemos? Intentamos cumplir con todos esos eventos para obtener todas esas sensaciones que queremos vivir!

Se desdibuja el “qué” en el “cómo”.

Agarrate cuando cumplis con todo y no te pasa que te sentís ni feliz ni exitoso ni inmortal. Sentís que en algún lugar hay algo que no cierra…

Más de este tema en la nota en la que participamos en el diario Clarín: http://www.clarin.com/buena-vida/tendencias/Mandatos_0_844715741.html